martes, 3 de mayo de 2011

Libertad de expresión en México: balance incierto

"La utopía está en el horizonte. Camino dos pasos, ella se aleja dos pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. ¿Entonces para qué sirve la utopía? Para eso, sirve para caminar."
Eduardo Galeano

Hace meses que me ronda la confusión. Al cabo de una etapa de poco más de dos años involucrada en actividades de defensa de la libertad de expresión, sigo en un balance incierto. Durante este tiempo he compartido el empeño, el compromiso, el esfuerzo y la dedicación de muchos compañeros de las organizaciones de la sociedad civil, que han transitado trechos más largos de camino y topado en más de una ocasión con el límite de la frustración, sin abandonar por ello la ruta. He aprendido de ellos tanto como de mis compañeros periodistas. De estos últimos, sobre todo. He mirado, de cerca y de lejos, los esfuerzos individuales y colectivos de muchos reporteros, fotógrafos, camarógrafos, empeñados en derribar el miedo, la mediocridad, la amenaza, la adversidad laboral, para cumplir nada más que con la pasión por informar, por reportear.